Como educadores, sabemos que preparar a los jóvenes para el estudio futuro y el lugar de trabajo es una parte esencial de nuestro trabajo. Una herramienta muy eficaz para desarrollar habilidades esenciales del siglo XXI -como la comunicación, la colaboración y la capacidad de alcanzar objetivos compartidos- es el aprendizaje cooperativo.
Sin embargo, averiguar cómo aplicar con éxito este enfoque en su consulta puede resultar difícil. Las tareas de aprendizaje cooperativo pueden requerir una planificación cuidadosa, una gestión centrada en el comportamiento y una gran carga de investigación.
Para ayudarte a sacar el máximo partido de esta técnica, hemos elaborado una guía en la que te explicamos cómo funciona, sus ventajas y algunas estrategias de aprendizaje cooperativo que puedes poner en práctica hoy mismo en tu aula.
Principales conclusiones
- El aprendizaje cooperativo implica que los alumnos trabajen juntos por un objetivo común.
- Es una forma estupenda de ayudar a los estudiantes a desarrollar habilidades clave para el futuro, como la comunicación y la colaboración.
- Las oportunidades pueden ser más largas y formales, o más cortas e informales.
- Establezca pautas de comportamiento claras antes de empezar y considere si necesita dar más o menos estructura a los grupos en función de sus niveles de independencia.
¿Qué es el aprendizaje cooperativo?
El aprendizaje cooperativo es más que un simple debate o una calificación entre iguales. Anima a los alumnos a trabajar juntos para lograr objetivos colectivos y conlleva una comunicación significativa, comprensión mutua y asumir la responsabilidad de su papel en el grupo. Puede contrastarse con el aprendizaje puramente individualista (centrado en que cada alumno complete sus propias tareas) o competitivo (en el que los alumnos intentan "ganar" superando a los demás).
¿Por qué es importante el aprendizaje cooperativo?
El aprendizaje cooperativo es una preparación esencial para el futuro de los alumnos, ya sea en la universidad o en el trabajo. Integrar el aprendizaje cooperativo en tu aula puede ayudar a tus alumnos a desarrollar las habilidades clave que necesitarán para trabajar en equipo, como una comunicación clara y la disposición a ayudar. También mejora su capacidad para resolver conflictos, negociar y asumir funciones de liderazgo.
Es más, el aprendizaje cooperativo aborda directamente habilidades del siglo XXI como la resolución de problemas, la creatividad y el pensamiento crítico, que serán esenciales para afrontar los obstáculos del mañana. Trabajar en grupo puede ayudar a los alumnos a tratar y sintetizar diversos puntos de vista, así como a ser capaces de generar nuevas formas de ver las cosas y llevar a los demás con ellos.
Múltiples estudios demuestran también que el aprendizaje cooperativo puede mejorar los resultados de los alumnos en los exámenes. Los alumnos memorizan mejor la información y desarrollan una comprensión más profunda de los temas cuando se les pide que expliquen sus ideas al resto del grupo y respondan de forma útil a lo que los demás tienen que decir.
Los alumnos también pueden tener que abordar el material de la lección de diversas formas, como la escritura, la expresión oral e incluso las interpretaciones creativas, lo que lo consolida de forma más eficaz que la recepción pasiva. La creatividad y variedad de las tareas cooperativas también pueden aumentar la motivación para aprender.
Tipos de aprendizaje cooperativo
Podemos dividir el aprendizaje cooperativo en 2 tipos principales:
Aprendizaje cooperativo formal
Las oportunidades formales de aprendizaje cooperativo están muy estructuradas y rigurosamente planificadas, teniendo en cuenta el nivel de independencia para el que están preparados sus alumnos y el andamiaje correspondiente. También puede estructurar las actividades para ayudarles a avanzar hacia tareas de grupo más autoguiadas.
Estas actividades pueden ser largas y ocupar una clase entera o, más a menudo, un conjunto de clases. Debe haber criterios de evaluación claros para que los alumnos trabajen, pero también es importante explicar qué habilidades sociales se van a trabajar.
Algunos ejemplos son:
- Los alumnos trabajan juntos en una investigación de grupo a lo largo de varias lecciones.
- Los equipos preparan las diferentes partes de un debate que tendrá lugar en una futura lección.
- Por parejas o en pequeños grupos, prepara una página web, un periódico o un vídeo documental sobre un tema concreto.
Usted debe seguir de cerca a los alumnos durante la unidad de estudio e incluir oportunidades de evaluación formativa. También puede realizar una evaluación sumativa al final de la unidad.
Aprendizaje cooperativo informal
El aprendizaje cooperativo informal suele tener una duración más corta, quizá sólo una lección o una actividad. Los alumnos deben seguir teniendo una tarea y un objetivo estructurados, pero puede requerir una configuración y una explicación menos profundas. Habrá oportunidades para la evaluación formativa, pero ésta puede ser menos adecuada para la evaluación final y sumativa.
Por ejemplo:
- Pensar-parejas-compartir: Los alumnos proponen su propia respuesta a una pregunta que invita a la reflexión, la comparten con un compañero y luego la debaten con el resto del grupo.
- Resumen de 30 segundos: Los alumnos se toman 30 segundos cada uno para resumir lo aprendido anteriormente y, a continuación, responden juntos a una pregunta más compleja.
- Crear un cartel: Los alumnos deben trabajar juntos para plasmar el tema de la lección anterior en un formato visual.
Aprendizaje cooperativo frente a aprendizaje colaborativo: Diferencias clave
Es posible que también haya oído el término aprendizaje colaborativo. El aprendizaje colaborativo consiste en que los alumnos se van a estudiar por su cuenta y vuelven para compartir con los demás en debates, discusiones o comentarios en línea. Esto difiere del aprendizaje cooperativo, en el que los estudiantes trabajan juntos en una tarea estructurada con resultados compartidos.
6 estrategias para aplicar el aprendizaje cooperativo en el aula
Cuando introduzcas el aprendizaje cooperativo en tu aula, ten en cuenta las siguientes estrategias para tener éxito:
1. Establecer las normas básicas
En el aprendizaje cooperativo, es muy importante establecer normas y límites claros. Una forma de que los alumnos se sientan más identificados es pedirles que establezcan y acuerden ellos mismos algunas de las normas. Es probable que los estudiantes tengan una buena idea de lo que funciona bien cuando tienen que cooperar, como no hablar por encima de los demás, respetar las ideas de los demás y no desviarse de la tarea.
2. Utilizar ejercicios de creación de equipos
Una vez que haya reunido a los alumnos en sus grupos cooperativos, puede ser una buena idea ayudarles a establecer vínculos introduciendo algunas actividades para romper el hielo. Esto es especialmente importante si planeas que las actividades de aprendizaje cooperativo se prolonguen durante varias lecciones. Un buen ejemplo es el juego "2 verdades y una mentira", en el que los alumnos adivinan qué datos sobre sus compañeros de equipo son falsos.
3. Prueba el método "rompecabezas
Divide a los alumnos en pequeños grupos y asigna a cada uno un tema de investigación diferente. Por ejemplo, mis alumnos de Historia trabajaron juntos para preparar una guía sobre el impacto del Imperio Británico en un país concreto.
Una vez que cada grupo haya completado su guía, divida a los alumnos en nuevos grupos con un miembro de cada uno de los equipos anteriores. A continuación, los alumnos comparten sus conocimientos, de modo que los nuevos equipos ya han aprendido sobre cada tema, formando la imagen completa del "rompecabezas".
A continuación, los nuevos equipos pueden trabajar juntos para responder a una pregunta evaluativa (según mi ejemplo, algo así como "¿Por qué es el Imperio Británico un tema importante sobre el que aprender en el mundo actual?").
4. Asignar investigaciones de grupo
Una técnica más avanzada consiste en pedir a los alumnos que diseñen y lleven a cabo una investigación en grupo. Por ejemplo, en ciencias, podría pedírseles que diseñaran un nuevo tipo de máquina voladora o que idearan una forma de probar una determinada reacción química.
Esta actividad imita las tareas que los alumnos pueden tener que realizar en su vida futura. Juntos, deben decidir los parámetros de su investigación, asignar tareas en el grupo y completar un borrador antes de presentarlo al resto de la clase.
5. Utilizar la tecnología
La tecnología puede ser una forma estupenda de facilitar la cooperación, ya sea dentro o fuera del aula. Puede ser tan sencillo como pedir a los alumnos que trabajen en un documento conjunto, o tan complejo como utilizar una plataforma digital de pruebas como TAO para crear un laboratorio de experimentos virtual, en el que los estudiantes puedan trabajar juntos como científicos de la vida real sin necesidad de equipos complejos.
6. Considerar los grupos de base
Aunque el trabajo en grupo ad hoc o a corto plazo puede ser eficaz, también puede decidir organizar a los alumnos en grupos base. Se trata de grupos o equipos a largo plazo que permanecen estables a lo largo de un semestre o incluso de todo un curso escolar. Pueden trabajar en diferentes tareas o proyectos, o tal vez en un proyecto global que pueda desarrollarse paralelamente al resto de su trabajo, como estudiar cómo pueden aplicar nuevas técnicas de aprendizaje en las distintas clases.
Otros recursos para profesores
- Más sobre la importancia del aprendizaje cooperativo de la Universidad de Cincinnati
- Una lista de enfoques de aprendizaje cooperativo de la Universidad de San Diego
- Un vistazo a cómo organizar el aula para el aprendizaje cooperativo del Chartered College of Teaching
El aprendizaje cooperativo tiene varias ventajas, como preparar a los alumnos para el futuro y mejorar sus notas. Implementarlo en el aula puede requerir cierta planificación y preparación, pero con nuestras sencillas estrategias podrás empezar en un abrir y cerrar de ojos.
Como siguiente paso, considere cómo el aprendizaje cooperativo podría ser una gran oportunidad para evaluar habilidades socioemocionales. También puede explorar técnicas de gestión del aula para poder impartir el aprendizaje cooperativo con confianza.
Introducción a la evaluación digital con la TAO
El aprendizaje cooperativo es una forma eficaz de fomentar las habilidades comunicativas y la responsabilidad de los alumnos dentro de un grupo. También puede impartirlo en línea, utilizando la plataforma de evaluación digital personalizable de TAO, que le permite crear diversos tipos de preguntas que simulan situaciones reales de resolución de problemas.
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Preguntas frecuentes
¿Cómo se benefician los alumnos del aprendizaje cooperativo?
El aprendizaje cooperativo ayuda a los alumnos a desarrollar habilidades de comunicación, responsabilidad personal y trabajo con los demás. Estas habilidades socioemocionales son elementos vitales de muchos trabajos y escenarios importantes de la vida, y por lo tanto equipan a los estudiantes para su futuro.
¿Qué problemas pueden surgir durante el aprendizaje cooperativo?
A veces pueden surgir conflictos entre los alumnos durante el aprendizaje cooperativo. Algunos alumnos también pueden desviarse de la tarea si creen que el trabajo está en manos de otros miembros del grupo. Por eso es importante establecer y acordar desde el principio unas pautas de comportamiento claras.